23 de noviembre
San Clemente I
papa y mártir
Apacienten el rebaño de Dios, que les ha sido confiado
Lectura de la primera carta del Apóstol san Pedro 5, 1-4
Queridos hermanos:
Exhorto a los presbíteros que están entre ustedes, siendo yo presbítero como ellos y
testigo de los sufrimientos de Cristo y copartícipe de la gloria que va a ser revelada. Apacienten el
rebaño de Dios, que les ha sido confiado; velen por él, no forzada, sino espontáneamente, como lo
quiere Dios; no por un interés mezquino, sino con abnegación; no pretendiendo dominar a los que les
han sido encomendados, sino siendo de corazón ejemplo para el rebaño.
Y cuando llegue el Jefe de los pastores, recibirán la corona imperecedera de gloria.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 88, 2-5. 21-22. 25. 27
R. ¡Cantaré eternamente tu misericordia, Señor!
Cantaré eternamente el amor del Señor,
proclamaré tu fidelidad por todas las generaciones.
Porque Tú has dicho: «Mi amor se mantendrá eternamente,
mi fidelidad está afianzada en el cielo». R.
Yo sellé una Alianza con mi elegido,
hice este juramento a David, mi servidor:
«Estableceré tu descendencia para siempre,
mantendré tu trono por todas las generaciones». R.
Encontré a David, mi servidor,
y lo ungí con el óleo sagrado,
para que mi mano esté siempre con él
y mi brazo lo haga poderoso. R.
Mi fidelidad y mi amor lo acompañarán,
su poder crecerá a causa de mi Nombre:
Él me dirá: «Tú eres mi Padre,
mi Dios, mi Roca salvadora». R.
ALELUIA Mc 1, 17
Aleluia.
«Síganme, y yo los haré pescadores de hombres»,
dice el Señor.
Aleluia.
EVANGELIO
Tú eres Pedro,
y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia
+
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 16, 13-19O bien:
San Columbano,
abad
Los confines de la tierra verán la salvación de nuestro Dios
Lectura del libro del profeta Isaías 52, 7-10
¡Qué hermosos son, sobre las montañas,
los pasos del que trae la buena noticia,
del que proclama la paz,
del que anuncia la felicidad,
del que proclama la salvación
y dice a Sión: «¡Tu Dios reina!»
¡Escucha! Tus centinelas levantan la voz,
gritan todos juntos de alegría,
porque ellos ven con sus propios ojos
el regreso del Señor a Sión.
¡Prorrumpan en gritos de alegría,
ruinas de Jerusalén,
porque el Señor consuela a su Pueblo,
Él redime a Jerusalén!
El Señor desnuda su santo brazo
a la vista de todas las naciones,
y todos los confines de la tierra
verán la salvación de nuestro Dios.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 95, 1-3. 7-8a. 10
R. ¡Anuncien las maravillas del Señor por todos los pueblos!
Canten al Señor un canto nuevo,
cante al Señor toda la tierra;
canten al Señor, bendigan su Nombre. R.
Día tras día, proclamen su victoria.
Anuncien su gloria entre las naciones,
y sus maravillas entre los pueblos. R.
Aclamen al Señor, familias de los pueblos,
aclamen la gloria y el poder del Señor;
aclamen la gloria del Nombre del Señor. R.
Digan entre las naciones: «¡el Señor reina!
El mundo está firme y no vacilará.
El Señor juzgará a los pueblos con rectitud». R.
ALELUIA Jn 8, 12
Aleluia.
«Yo soy la luz del mundo;
el que me sigue tendrá la luz de la vida», dice el Señor.
Aleluia.
EVANGELIO
Te seguiré adonde vayas
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas
9, 57-62
Mientras iban caminando, alguien le dijo a Jesús: «¡Te seguiré adonde vayas!»
Jesús le respondió: «Los zorros tienen sus cuevas y las aves del cielo sus
nidos, pero el Hijo del hombre no tiene dónde reclinar la cabeza».
Y dijo a otro: «Sígueme». Él respondió: «Permíteme que vaya primero a enterrar a
mi padre». Pero Jesús le respondió: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú ve a
anunciar el Reino de Dios».
Otro le dijo: «Te seguiré, Señor, pero permíteme antes despedirme de los míos».
Jesús le respondió: «El que ha puesto la mano en el arado y mira hacia atrás, no sirve para el
Reino de Dios».
Palabra del Señor.