30 de septiembre
San Jerónimo
presbítero y doctor de la Iglesia
Memoria

Toda la Escritura está inspirada por Dios
y es útil para enseñar

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo     3, 14-17

Querido hermano:
Tú permanece fiel a la doctrina que aprendiste y de la que estás plenamente convencido: tú sabes de quiénes la has recibido. Recuerda que desde la niñez conoces las Sagradas Escrituras: ellas pueden darte la sabiduría que conduce a la salvación, mediante la fe en Cristo Jesús. Toda la Escritura está inspirada por Dios, y es útil para enseñar y para argüir, para corregir y para educar en la justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto y esté preparado para hacer siempre el bien.

Palabra de Dios.


SALMO
    Sal 118, 9. 10. 11. 12. 13. 14 (R.: 12b)

R.
Enséñame, Señor, tus preceptos.

¿Cómo un joven llevará una vida honesta?
Cumpliendo tus palabras. R.

Yo te busco de todo corazón:
no permitas que me aparte de tus mandamientos. R.

Conservo tu palabra en mi corazón,
para no pecar contra ti. R.

Tú eres bendito, Señor:
enséñame tus preceptos. R.

Yo proclamo con mis labios
todos los juicios de tu boca. R.

Me alegro de cumplir tus prescripciones,
más que de todas las riquezas. R.


ALELUIA     Cf. Hech 16, 14b

Señor, toca nuestro corazón,
para que aceptemos las palabras de tu Hijo.


EVANGELIO

Lo nuevo y lo viejo

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo     13, 47-52

Jesús dijo a la multitud:
«El Reino de los Cielos se parece también a una red que se echa al mar y recoge toda clase de peces. Cuando está llena, los pescadores la sacan a la orilla y, sentándose, recogen lo bueno en canastas y tiran lo que no sirve. Así sucederá al fin del mundo: vendrán los ángeles y separarán a los malos de entre los justos, para arrojarlos en el horno ardiente. Allí habrá llanto y rechinar de dientes.
¿Comprendieron todo esto?»
«Sí», le respondieron.
Entonces agregó: «Todo escriba convertido en discípulo del Reino de los Cielos se parece a un dueño de casa que saca de sus reservas lo nuevo y lo viejo.»

Palabra del Señor.